Sabéis que nos encantan los colores neutros. En nuestras reformas solemos usar mucho el blanco y colores claros, porque sabemos que dan mucha luz a espacios pequeños. ¿Un ejemplo? Este piso en el centro de Gijón. Por eso, hoy queremos explicaros cómo podemos utilizar los colores para generar emociones en nuestro hogar.
¡Así es, gracias al color podemos ayudar a controlar cómo nos sentimos!
¿Cómo influyen los colores en nuestras emociones?
La psicología del color estudia cómo nos sentimos y nos comportamos ante distintos colores, brillos e intensidades. Así que, ¿cómo nos afectan? Ponemos unos ejemplos:
- El azul nos inspira tranquilidad y nos relaja.
- El verde es el color de la esperanza y el crecimiento.
- El rojo es un color extremo: Inspira amor y guerra.
Como veis, debemos tener mucho cuidado al elegir qué tonalidades elegir a la hora de pintar nuestro hogar.
¿Qué tonalidades debo elegir en mi casa?
Os traemos ejemplos reales. En esta reforma elegimos la siguiente combinación de color:
- Blanco: Transmite serenidad y fomenta la creatividad. Es el color de la relajación por excelencia.
- Gris claro: Al ser un color suave, también transmite calma. Además, es el color del equilibrio.
- Negro: Es el color de la elegancia.
- Maderas: La madera nos inspira calidez y belleza.
Como veis, huimos de las gamas más fuertes, que provocan sentimientos potentes. Buscamos un hogar tranquilo, en el que poder relajarnos y disfrutar.
¡Vamos con ejemplos reales!
Un recibidor oscuro, transformado en una entrada elegante, gracias a sus combinaciones de color:
El salón, que antes no era acogedor en absoluto, ahora es un espacio para el relax, claro y precioso gracias a su acabado en madera:
¿Y quién dice que nuestro baño no puede respirar también la misma elegancia y equilibrio? ¡Apostamos por el gris y el minimalismo!
Los pasillos, esos grandes olvidados…
Nuestra habitación debe ser nuestro templo del descanso. Por eso eliminamos colores fuertes y exceso de decoración. ¡Sólo las fotos nos inspiran una calma brutal!
Y la cocina. Aquí apostamos por la elegancia del negro. ¡Nos encanta!
Y vosotros, ¿usáis los colores para ayudaros con vuestras emociones?